Dragon Ball Xenoverse 2

Segundas partes nunca fueron buenas. Este dicho podría resumir a la perfección a Dragon Ball Xenoverse 2, que tras el éxito de ventas y buena crítica que cosechó la primera entrega, se ha dormido en los laureles. Para hacerse una idea más completa de lo que aporta esta nueva entrega, recomendamos leer el análisis anterior para valorar las novedades y si merece la pena adquirirlo.

Dragon Ball Xenoverse 2, publicado entre finales de octubre y principios de noviembre de 2016, está basado en el universo de Akira Toriyama. Desarrollado por Dimps y distribuido por Bandai Namco, el juego se comercializó para PlayStation 4, Xbox One y la plataforma para PC Steam. Posteriormente se incluyeron varios contenidos descargables que hicieron más completo el juego y se publicó la versión de Nintendo Switch,  no valorado en este artículo.

El argumento nos vuelve a poner en la piel de un patrullero del tiempo tras lo acontecido en Xenoverse. Nuestro objetivo será el mismo: ayudar a la Kaiyoshin del tiempo y a Trunks a desenmarañar las distorsiones que Miira y Towa crean en la historia de Dragon Ball. En esta ocasión, también nos supervisará el Kai anciano, que en la primera entrega tan sólo aparecía si adquirías uno de los DLC.

El verdadero atractivo de este título, al igual que en el primero, es revivir una vez más los combates de la serie con Son Goku, sus amigos y enemigos. Sin embargo, en gran parte del juego nos da la impresión de estar reviviendo el mismo juego que ya disfrutamos en Xenoverse.

Lo primero que llama la atención es el rediseño de la ciudad. Tokitoki ahora se llama Conton City, es mucho más amplia y homogénea -ya no existen los tiempos de carga cada vez que quieres ir de una zona a otra, a no ser que uses el teletransporte-, e incluye la posibilidad de recorrerla volando una vez completada la saga de Freezer. En ella encontraremos objetos en el suelo, NPC que ofrecen tareas o misiones secundarias y distintos personajes de Dragon Ball que harán de maestros, como ocurriera en en Xenoverse, con la diferencia de que su ubicación no es aleatoria.

Otras modificaciones que se aprecian en Dragon Ball Xenoverse 2 son el sistema de combate y el uso de determinadas habilidades. La transformación en Super Saiyan no se acaba cuando se agota el Ki del personaje, pero ya no es posible realizar ataques especiales y definitivos sin consumir barras de Ki mientras estamos en dicho estado. Otros ejemplos son la inclusión de la posibilidad de bajar la resistencia de un rival a cero, dejándolo indefenso, con un puñetazo cargado, o la simplificación del uso del movimiento evanescente de forma manual.

La novedad más atractiva es la inclusión de las misiones de experto, misiones más complicadas de completar en las que debemos derrotar a uno o varios enemigos muy poderosos. Para ello, unimos fuerza con otros cinco patrulleros. Esto resulta más sencillo si jugamos online (se requiere suscripción), el problema llega cuando jugamos offline, ya que los patrulleros son reemplazados por NPC cuya IA es muy limitada -se dedican a ser meros espectadores durante el combare- y las misiones se tornan prácticamente imposibles de completar a partir de la número quince (de 17). Y es que Dragon Ball Xenoverse 2 parece concebido por y para jugarlo en línea, la única forma de participar en los eventos semanales.

Además, la curva de dificultad en Xenoverse 2 está mal ajustada. Nuestro personaje sube muy rápido de nivel y todo es bastante sencillo al principio pero, según avanzamos, encontramos misiones de experto y secundarias que, a pesar de estar al máximo nivel, son realmente complicadas de superar y están pensadas para jugarlas online.

Pese a la gran cantidad de misiones secundarias que podremos realizar y personajes a escoger (Slug, Turles, las transformaciones de Cooler o algunos personajes de Súper y GT), el trabajo del equipo de Dragon Ball Xenoverse 2 ha sido bastante escaso respecto a lo visto en el anterior título.

El juego parece una expansión del primero: de las 100 misiones secundarias, más del 70% ya aparecían en el anterior, apenas han incluido un escenario nuevo y los restantes cuentan con un paupérrimo nivel de detalle. Los personajes ídem, la mayoría del plantel idéntico al del primer Xenoverse, así como la personalización de nuestro héroe. Como novedad, ahora nos podremos convertir en Super Saiyan 3 o en Golden para los Freezer.

Para aportar dinamismo al juego, además de las misiones de experto, Conton City incluye 5 fallas temporales que recrean una zona del universo Dragon Ball. En Namek tendremos que ayudar a Nail en misiones con las Bolas de Dragón; a Monstruo Bu tendremos que alimentarlo para que pueda crear una familia; y en la Nave de Freezer habremos de alistarnos en el ejército para trabajar a sus órdenes. Aunque al principio resulta un añadido original, al finalizar todas las misiones de determinadas localizaciones, éstas siguen apareciendo, lo que es una pesadez.

Tampoco se han arreglado algunos aspectos técnicos como la molesta cámara o el hecho de que cuando aparezca un nuevo rival o nuestro enemigo se transforme se corten los ataques especiales y definitivos que estamos lanzando, perdiendo así nuestro preciado Ki. Estos aspectos, entre otros muchos, hacen que el sistema de combate sea injusto con el jugador y crea bastante frustración.

Si no has jugado a la primera entrega y eres fan de la serie, Dragon Ball Xenoverse 2 es una buena elección, ya que recopila y mejora el anterior. Pero si le has echado muchas horas al primero, como en nuestro caso, es una gran decepción.

El pase de diapositivas requiere JavaScript.

Deja un comentario